El gobierno boliviano denunció el pasado jueves 8 de julio, que el 13 de noviembre de 2019, a solo 3 días después al golpe de Estado en Bolivia, las Fuerzas Armadas Bolivianas le agradecen al ex presidente argentino Mauricio Macri el envío de municiones para consolidar por la fuerza el gobierno de facto de Añez. Por orden del gobierno macrista, más de 40 mil cartuchos de alto calibre, granadas y gases lacrimógenos fueron enviados ocultos en aviones Hércules.
Las masacres de Senkata, Sacaba y el Pedregal, en las cuales decenas de compatriotas de la Patria Grande fueron asesinados, así como las represiones sistemáticas contra el pueblo boliviano, se llevaron adelante con el armamento conjunto y coordinado de las derechas de nuestros países, dirigidas por el imperialismo norteamericano.
Esto demuestra lo que venimos sosteniendo cuando denunciamos a Luis Almagro y la Secretaria General de la OEA de ser responsables de planificar, justificar y consolidar el golpe de Estado en Bolivia: un nuevo Plan Cóndor se implementó en Nuestramérica, para desmantelar los gobiernos revolucionarios y progresistas de la Región, y reprimir a las mayorías que soñamos y construimos un mundo justo y una América unida.
El gobierno de Macri, entre 2015 y 2019, también coordinó su política con el imperialismo, con el FMI y con las derechas latinoamericanas, destruyendo UNASUR y construyendo el golpista Grupo de Lima. Es el mismo gobierno que en Argentina aplicó el recetario económico neoliberal, ajustando la inversión pública en educación, salud, vivienda, trabajo, a través de asesinatos, presas y presos políticos y represiones callejeras, dejando una deuda externa impagable y un tendal de empobrecidos, hambrientos y desamparados.
Frente al conocimiento de estos hechos de extrema gravedad de colaboración entre los planes golpistas y represores, el presidente argentino Alberto Fernández, en un acto de soberanía y vocación de reafirmar los lazos democráticos entre nuestros países, repudió los actos de su predecesor, y pidió disculpas en nombre del pueblo argentino al gobierno y al pueblo boliviano.
Es imperioso ahora poner a disposición toda la capacidad de los Estados y establecer mecanismos de colaboración conjunta para investigar e impedir que estos crímenes contra la humanidad queden impunes.
Exigimos que ambos países asuman acciones a la brevedad, pidiendo la captura de Mauricio Macri y de todos los implicados en la planificación y consecución del golpe, para que sean juzgados adecuadamente y que ambos Estados pongan a disposición todas las pruebas al respecto de éste y otros delitos contra nuestros pueblos.
¡Ni olvido ni perdón, Justicia!
Nadie ni nada será olvidado.
Nadie suelta la mano de nadie.
FIRMAN:
Liga Argentina por los Derechos Humanos.
Liga Boliviana por los Derechos Humanos.
Liga Mexicana por la defensa de los Derechos Humanos.
INREDH (Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos) Perú.
APRODEH (Asociación Pro Derechos Humanos) Perú.
CODEPU (Corporación de promoción y defensa de los Derechos del Pueblo) Chile.
EQUIDAD Centro de Políticas Públicas y Derechos Humanos, Perú.
INREDH (Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos) Ecuador.
CCS (Centro de capacitación social) Panamá.
CDHES (Comisión de DDHH de El Salvador).
CEDAL (Centro de derechos y desarrollo) Perú.
MNDH (Movimiento Nacional de Derechos Humanos) Brasil.
CNDH-RD (Comisión Nacional de Derechos Humanos) República Dominicana.
AFEP (Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos) Chile.
FLD (Fundación lazos de Dignidad) Colombia.
Coordinadora Americana por los derechos de los pueblos.
SOA (Observatorio de la Escuela de las Américas).
CEDHU (Comisión Ecuménica por los Derechos Humanos) Ecuador.
10 de julio de 2021