Por los 35 años de la Limeddh
Secuelas del viejo régimen
Las secuelas del viejo régimen, lo que se vivió en México NO es fruto de un: ESTADO FALLIDO , por el contrario, no es fruto de una falla, el Estado Mexicano es el responsable de haber creado grupos de delincuencia y de haberlos organizado conforme a las políticas impuestas y alentadas por los Estados Unidos. Afirmamos que en los últimos sexenios, en los regímenes conservadores y neoliberales se fue instalando y estableciendo en México un Narco-Estado-Policiaco-Militar.
“Durante este periodo Neoliberal, el Estado mexicano vivió deliberadamente durante años el debilitamiento del Estado de Derecho garante de los derechos humanos. Esta situación fue aprovechada para fortalecer la “delincuencia organizada”, que actuó́ de forma desenfrenada e impune, por la descomposición de los tres órdenes de y niveles de gobierno, federal, estatal y municipal quienes basados en la corrupción e impunidad impidieron garantizar la seguridad pública y el acceso a la justicia. La violencia llegó a su máxima expresión al grado de tener confrontada a la población y dañar profundamente el tejido social.
Ha sido el pueblo quien reconoce y legitima la acción de la Limeddh, es él, a través de las organizaciones y personas que se acercan a pedir nuestra intervención y son ellos quienes hacen que tengamos un reconocimiento en las instancias nacionales e internacionales en materia de derechos humanos, el Estado y sus instituciones no son garantes de los derechos humanos, las libertades fundamentales y la democracia. El Estado de derecho impone leyes de excepción, que restringen los derechos.
Cumplimos 35 años de resi-existencia, es decir de recia existencia, o de resistencia, o reinsistencia o de reincidencia necia por seguir luchando por los derechos humanos.
A 35 años de historia y la suma de historias de los que han formado parte de nuestra organización, deseamos iniciar este año cambiando la historia.
Son tantos los que piden “ponerse al día”,”dejar ideas trasnochadas” y el compromiso y adoptar el pragmatismo cuasi empresarial de aceptar fondos y recursos necesarios sin importar su procedencia escudándose que servirían para el desarrollo de nuestras actividades.
Ante eso, mayores exigencias nos pedimos a todos los que participamos en la Limeddh, nos pedimos lograr la congruencia entre el pensar el decir y el hacer, pensar lo que se dice, decir lo que se piensa y hacer lo que se dice y piensa, para después pensar lo que se hace y volver este esfuerzo al infinito a cada paso de nuestras vidas, para hacer praxis, allí están los principales factores de nuestra existencia.
Nos pedimos más creatividad y sobresfuerzo y que cada uno de nosotros nos sustentemos en los pilares fundamentales para la vida. Además de los aspectos, político, ideológicos, éticos, estéticos, profesionales, técnico-científicos, económicos, también los referentes a la salud tanto física como psicosociales. Actuamos tan de cerca con los sentimientos, las emociones y el riesgo, que es necesario equilibrar todos estos factores.
Felicitamos y agradecemos las enseñanzas y aportes que cada uno de todos los que a lo largo de estos 35 años han contribuido a mantener viva esta llama encendida por los derechos de los pueblos. A todos los que trabajamos juntos por los derechos humanos más allá de las distancias y el tiempo.
Son tantos los logros cosechados y no obstante, es apenas nada ante la grave situación que vivimos y aun así, ese poco es muchísimo para aquellos a quienes logramos acompañar en su lucha por los derechos humanos y las libertades fundamentales. Por eso agradecemos y celebramos nuestros 35 años.
Nos han robado parte importante de nuestro acervo histórico, pero si la historia la hacemos nosotros, también reescribamos nuestra historia y más aún, trasformemos la historia de cada uno de nosotros, para eso tenemos el poder y lo ejercemos. Hoy cada uno de nosotros seamos uno solo, sumemos nuestros esfuerzos en uno solo, en la estrategia general del buen vivir.
Por Victorio, Laura +, Doña Chabe +, ejemplos de vida, ustedes encendieron la flama de la Limeddh, todos somos uno, la suma de todos los unos y los otros que nos unimos para impedir que los más poderosos nos desunan y destruyan. Nos toca cuidarla y avivarla para que siga siendo "una llama encendida por los derechos de los pueblos"
¡UNA LLAMA ENCENDIDA POR LOS DERECHOS DE LOS PUEBLOS¡
Limeddh,
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Editorial